Hoy por vez primera, voy a tratar de un tema diferente, aunque enmarcado en el mismo ambiente y es relacionado con mi profesión.
En mi formación como medico y especialista en cuba de la que estoy eternamente agradecido, se nos instruyo en el carácter investigador, en el ejercicio de la profe--sion, de ahí que no tengo prejuicio a la hora de implementar un tratamiento y no me caso solamente con medicamentos tradicionales.
El ser sencillo y humilde es algo importante, por lo que no me deslumbra el ver muchos cuadros colgados de la pared o un lujoso vehículo,si bien es cierto que el que trabaja debe tener comodidades siempre me he dicho que el que sabe no tiene que adornarse su trabajo y desempeño lo dicen todo.
Las enfermedades en un 80% están en la mente humana y en la inestabilidad de la persona, esto repercute a la larga en el organismo, haciendo que la afección llegue al grado que produzca cambios degenerativos o vulnere la estabilidad de nuestro sistema, permitiendo que enfermedades que siempre están ahí fuera se expresen.
Nuestro cuerpo es energía concentrada y el desequilibrio de esta es lo que hace que nos enfermemos.Esto ocurren en un gran por ciento de enfermedades entre ellas el cáncer.
Estamos cansados de ver personas que enfermas de cáncer y que no lo saben permanecen mucho tiempo estables y desde que se lo dicen empeoran, por que nos han enseñado a temerle a esta enfermedad, a tenerle pánico, esto nos derrumumba y permite que la misma progrese. Lo triste de esto es que habemos profesionales que transmitimos este temor
continuara............
